Como ya vimos, una mala campaña publicitaria puede ser decisiva para ganar o perder las elecciones. Quienes se encargan de asesorar a los principales políticos y políticas deben tener en cuenta muchos factores que harán a su eficacia o ineficacia. Entre ellos se cuentan la estética, los discursos, los gestos, el calendario electoral (a futuro), la opinión pública, entre otros.
Vale aclarar que desde este espacio no se pretende favorecer mediante los análisis a ningún partido político. El objetivo principal es comparar cómo se pueden modificar los discursos de una campaña a otra, de una década a otra, y qué recursos se utilizan para atraer al electorado.
En el 2007, los spots publicitarios de Unión-PRO centraron su atención en los problemas cotidianos de la población. Si bien fue un año especial para las elecciones ya que eran presidenciales y los comicios se habían realizado en dos fechas –según las jurisdicciones, en junio y octubre-, las campañas apuntaban a un objetivo común.
"Va a estar bueno Buenos Aires"
Mauricio Macri, Gabriela Michetti.
Con el slogan “Va a estar bueno Buenos Aires”, Unión-PRO centró su campaña en los cambios que la Ciudad de Buenos Aires debía afrontar para convertirse en un lugar ideal donde vivir.
“¿Quién camina por las veredas rotas?, Todos”. Con este tipo de preguntas y respuestas, lo que se pretendió fue unificar al electorado. Lejos de fragmentar sus propuestas a distintos grupos sociales y etarios, la connotación de la palabra “todos” tiene un alto contenido emotivo que buscó la sensibilización en los receptores del spot y de la campaña gráfica de ese año. Sin embargo, los números electorales demostraron que si bien lograron imponerse en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, fue un sector social y territorial específico el que le dio el triunfo.
"Un día"
Mauricio Macri, Francisco De Narváez, Gabriela Michetti
Este año Unión-PRO apuntó sus dardos positivamente. Si en el 2007 centró su discurso en lo que nadie quería, en estas elecciones puso énfasis en lo que se espera. Pasó de una visión pesimista, a una esperanzadora. “Un día” todo va a ser mejor, y ellos no se cansan de repetir que ese día va a llegar si ganan las elecciones.
Estéticamente los dos spots son prácticamente iguales: fondo verde, foco en quien habla, frases que se complementan, y un mensaje que apunta a la sensibilización. Mantienen una continuidad. Sin embargo, carecen de propuestas, y es algo que se verá de ahora en adelante, ya que es común a casi todas las publicidades políticas.
Un minuto en televisión es tan caro que quienes pueden pagarlo no lo desperdiciarán en plataformas políticas, sino en dar a conocer sus caras y sus nombres para que quienes estén habilitados a votar los reconozcan en medio de tanto papelerío de boletas dentro del cuarto oscuro. ¿Se subestima de esta forma al electorado? Es muy probable, pero echen un vistazo y verifiquen cuántos saben lo que se propone y quién lo dice.
Paula Rey
Pamela Querejeta Leiva
1 comentarios:
No puedo con mi ser, y tengo que aclarar que quien le hace la campaña al PRO, es el mismo que hizo la prometedora campaña de De la Rúa. Medite gente, la publicidad vende y para vender más no siempre se dice la verdad.
La política, la política....
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